El
viento y el sol discutían acerca de cual de los
dos era el más fuerte. De pronto, vieron pasar a
un hombre por un camino y el sol dijo:
- He pensado una manera de solucionar nuestra
discusión. Aquél de los dos que obligue al
hombre a quitarse la campera, será el más
fuerte.
¡Comienza!
El sol se retiró tras una nube y el viento
comenzó a soplar con fuerza. Pero cuanto más
soplaba, más se apretaba el caminante la campera
al cuerpo; hasta que el viento, desanimado, tuvo
que renunciar a su propósito.
Entonces salió el sol... dejó caer sus rayos
sobre el hombre y éste sintió tanto calor, que
se quitó la campera.
A
veces más vale maña que fuerza
Volver
a Fábulas para niños
|